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Taller Internacional Espluga de Cuberes. “Vivir en el acantilado”

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El Taller Internacional Espluga de Cuberes ha sido el primer hito del proyecto Euro-mediterráneo “Vivir en el acantilado”, que debe realizar un análisis del hábitat troglodítico y del despoblamiento rural en el Mediterráneo. El objetivo de este proyecto es estudiar sistemáticamente esta tipología de arquitectura troglodítica en toda la cuenca mediterránea y analizar las oportunidades que ofrece en su preservación para funciones diversas y desarrollo local.

El Taller se llevó a cabo en el Pallars, comarca del Pirineo del norte de Cataluña, entre el 26 de agosto y el 7 de septiembre de 2024, con la participación de un grupo multidisciplinar de 30 profesionales de 8 países del arco del Mediterráneo.

La organización corrió a cargo de RehabiMed con la colaboración de la Universidad Politécnica de Cataluña y la Universidad de Cagliari con el apoyo del ICOMOS, la AECID, el IEMed, la UpM y la Generalidad de Cataluña y la imprescindible implicación de organizaciones locales como: Geoparc Origens, Ayuntamientos de Baix Pallars y de Talarn, Ecomuseu Valls d’Àneu o el Colegio de Arquitectura Técnica de Lleida.


EL LUGAR

El Taller tuvo lugar en Espluga de Cuberes, una amplia finca que cuenta con varias construcciones aprovechando una gran cavidad de un acantilado de la sierra de Cuberes, dentro del Geoparque Orígenes reconocido por la UNESCO.

Se trata de un conjunto de edificaciones iniciadas en el siglo X, dentro de una cavidad de la montaña. Una cueva de unos 300 metros de largo y unos 40 de profundidad en los tramos que más se adentran dentro de la roca. Para llegar, es necesario realizar una pequeña excursión y caminar un poco más de una hora.

Entre los edificios que componen el asentamiento, cabe destacar la interesante iglesia románica de Santa Coloma (siglo XI), que seguramente formaba parte de un monasterio benedictino femenino, vinculado al de Gerri de la Sal y a Sant Pere de les Maleses. También hay tres edificios residenciales que muestran la evolución en el tiempo de la masía medieval que sustituyó al monasterio. Por otro lado, se pueden identificar otras construcciones de servicios como un gran horno de pan, dos fuentes, un granero y otras construcciones menores. El lugar constituye un recinto cerrado y fortificado de gran interés histórico, alrededor del cual hay una serie de campos abancalados en los que se ha producido todo lo necesario para una economía autosuficiente y bastante rica, con cereales, viña , olivo, huerta, cría de cabras y ovejas, etc. La masía y sus tierras de cultivo fueron abandonadas a mediados del siglo XX, en el marco de la ola migratoria que sufrió el Pallars, y ya empieza a mostrar signos de una degradación importante.


LA METODOLOGÍA

El Taller ha desarrollado actividades de recogida de datos sobre el terreno y elaboración de la información recogida. También se han organizado conferencias y debates técnicos, y visitas a sitios similares de la zona.

Por un lado, se ha trabajado la escala territorial en su entorno natural (paisaje y geología), el territorio humanizado (etnobotánica, gestión de cultivos y agua), la historia y arqueología de la zona, el patrimonio material e inmaterial. Los participantes han presentado ejemplos similares de asentamientos troglodíticos en sus países mediterráneos. Por otra parte, se abrieron debates sobre el despoblamiento rural y los pueblos abandonados y los retos para la preservación.

El análisis ha sido holístico e interdisciplinario, de la mano de diversos profesionales y expertos locales: Geología (Xavier Mir), Aprovechamiento del medio natural (Àreu Riu y Jordi Castilló), Geografía y demografía (Arcadi Castilló), Arqueología e historia (Maite Arilla , Jesús Sánchez y Cisco Farràs), Urbanismo (Carlo Atzeni), Arquitectura (Xavier Casanovas), Construcción (Josep Coll y Joan Ramon Rosell), Bioclimatismo (Xavier Casanovas), Formas de vida tradicional (Ignasi Ros) o Mitología y leyendas (Pep Cuello)


TRABAJO DE CAMPO

La primera tarea realizada en Espluga fue realizar un levantamiento gráfico de precisión, por lo que se utilizaron técnicas de fotogrametría y de láser escáner. En base a la información gráfica, se organizaron varios grupos de trabajo focalizados en los diferentes aspectos a analizar, que han profundizado en el conocimiento del entorno natural y su aprovechamiento, en el estudio de la estructura urbana del asentamiento y su accesibilidad y de los diferentes edificios existentes, buscando una cronología histórica que permita conocer su evolución. Esto ha permitido documentar en detalle el asentamiento, identificar las técnicas y materiales de construcción, realizar una diagnosis estructural y constructiva y hacer un estudio del comportamiento bioclimático del hábitat.

VISITAS

Como complemento al conocimiento de Espluga y para aportar información sobre otras experiencias de revitalización en la zona, los participantes realizaron visitas guiadas por expertos a diversos lugares de la comarca.

Cueva Esplugell

Situada en el Valle de Serradell, conocida por el buen número de cuevas con restos prehistóricos documentados, esta cueva es un ejemplo de permanencia en la ocupación con objetivos residenciales hasta épocas recientes. Un caso similar al de la Espluga.


Aramunt Vell

Pueblo abandonado en la misma época que Espluga, que fue objeto de una iniciativa municipal para su regeneración, mediante la creación de una Escuela de oficios de la construcción tradicional. Desgraciadamente, después de unos 10 años de trabajos y de rehabilitación de algunos edificios, la escuela se cerró, por falta de recursos y hoy el pueblo vuelve a estar abandonado.


Refugio de Cuberes

Un antiguo edificio de montaña abandonado, en la cabeza de la sierra de Cuberes, fue rehabilitado por dos jóvenes para convertirlo en un refugio que facilita la visita de la zona. Una iniciativa privada que ha permitido salvaguardar el edificio y dinamizar la economía de la zona.


Buseu project

Pueblo pallarés abandonado, que compró un particular para rehabilitarlo y convertirlo en un atractivo turístico de calidad relacionado con la naturaleza y el entorno, especialmente como observatorio de aves y fauna salvaje.


PRESENTACIÓN DE LOS RESULTADOS

Como clausura del Taller, el sábado 7 de septiembre en el Epicentre de Tremp, se hizo una presentación de los resultados alcanzados con el Taller de Espluga de Cuberes abierto a todos los interesados ​​de la comarca. También se explicó el Proyecto “Vivir en el acantilado”, donde se puso de manifiesto la importancia de este patrimonio compartido en todo el Mediterráneo. En una mesa redonda con los agentes locales, se debatieron proyectos de futuro para la preservación y desarrollo del territorio.

Actualmente sólo existen estudios puntuales sobre los habitados troglodíticos, y este primer taller quiere ser el punto de partida de un proyecto muy ambicioso que pretende analizar, estudiar e inventariar la arquitectura troglodítica en todo el Mediterráneo, englobando tanto el norte de África como Oriente Próximo y el sur de Europa.


EQUIPO ORGANIZADOR Y PARTICIPANTES

Han aportado su contribución al Taller:

Anthony Bou Kabalan Geagea, Darda Bencheikh, Najem Eddine Romdhane, Dahbia Abbou, Hafsa Özdemir, Joyce Raffoul, Ziad Abuowda, Nouhaila Taim, Mouna Bouziri, Ali Assouab, Amira Sabai, Hela Ammar, Asma Dehbia Oumediber, Andrea Margagliotti, Giulia Marchiano, Maria Carla Samiu, Ariel Alejandro Gajardo, Sara Vima, Felipe Buil, Xavier Mir, Àreu Riu, Jordi Castilló, Maite Arilla, Jesús Sánchez, Arcadi Castilló, Cisco Farràs, Carlo Atzeni, Xavier Casanovas, Josep Coll, Joan Ramon Rosell, Ignasi Ros, Pep Coll, Peter Hall i Tomàs G. Espot.

El proyecto ha sido impulsado por la Asociación RehabiMed con la colaboración de la Universidad Politécnica de Cataluña (upc) y la Universidad de Cagliari, con el apoyo del ICOMOS, de la Agencia Española de Cooperación (AECID), del Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed), de la Unión por el Mediterráneo (UpM), de la Generalitat de Catalunya y diversas universidades y entidades locales mediterráneas. Más allá de las organizaciones y entidades de carácter nacional e internacional, se ha contado con la imprescindible implicación de organizaciones locales como son: el Geoparc Origens, los ayuntamientos de Baix Pallars y de Talarn, el Ecomuseo Valls d’Àneu, la Diputación de Lérida (IEI) o el Colegio de Arquitectura Técnica de Lleida.